Aproximación a la organización del SNC: sustancia gris y sustancia blanca

Para explicar la organización anatomofuncional del SNC, partimos de la idea de que estructura y función van unidas y que sólo conociendo su organización anatómica se pueden empezar a comprender las complejas y variadas funciones que lleva a cabo el SNC.

El tejido nervioso contiene dos componentes, uno de color pardo -la sustancia gris- y otro blanquecino -la sustancia blanca-, que cuando se tratan con las técnicas específicas revelan los elementos que los forman (Fig. 8.1).

En la sustancia gris se localizan los cuerpos neuronales, las dendritas, los axones cortos de las interneuronas y los terminales de los axones largos que establecen sinapsis con estos elementos celulares. La multitud de neuronas de la sustancia gris de cada división forma agrupaciones neuronales -estructuras- que establecen comunicación con otras y que participan en una función. Dependiendo de su organización se distinguen distintos tipos de estructuras. Las que presentan una organización más compleja son las que tienen las células sumamente organizadas formando láminas o capas. Las dos grandes estructuras laminadas forman la superficie de los hemisferios cerebrales y del cerebelo, por lo que se denominan corteza. Las estructuras que, en general, carecen de esta organización, se denominan núcleos.

Los núcleos son agrupaciones de muchas neuronas que a primera vista parece que carecen de una organización definida, pero que presentan una forma y apariencia compacta que permite delinear sus límites (no obstante, hay núcleos con diferente grado de organización, por ejemplo, en algunos se establecen divisiones por su densidad celular o características neuroquímicas, y algunos están organizados en láminas). Los nombres de los núcleos suelen estar relacionados con su localización (núcleos pontinos), color (núcleo rojo), forma (núcleo caudado), nombre del anatomista que los identificó (núcleo basal de Meynert), etc.

Los términos área y región se utilizan para referirse a zonas amplias de distintas divisiones que tienen límites poco definidos, baja densidad celular y que suelen estar atravesadas por axones (fib ras) de paso. Sin embargo, cuando hablemos de áreas en la corteza cerebral nos referiremos a un concepto distinto al que acabamos de indicar, pero esto lo veremos mejor más adelante (además, región y zona se utilizan frecuentemente en su acepción de localización).

La sustancia blanca la forman los axones de las neuronas de proyección (excepto en la médula espinal que incluye axones largos de interneuronas), y debe su color blanquecino característico a la mielina que recubre los axones para mejorar la velocidad de conducción de las señales nerviosas. En función de su longitud, los axones conectan estructuras de la sustancia gris más o menos distantes, pudiendo comunicar estructuras de una misma división, por ejemplo del diencéfalo, o si son muy largos comunicar estructuras que se localizan en divisiones distantes, por ejemplo, una en un hemisferio cerebral y la otra en la zona lumbar de la médula espinal.

El entramado que forma la multitud de axones que comunica las estructuras de cada división del SNC, entre sí y con las de otras divisiones, está finamente organizado en agrupaciones que forman las vías nerviosas. Se distinguen distintos tipos de vías nerviosas en función de su origen, terminación o tamaño. En general, el término tracto nos indica que la vía es una agrupación de axones que se originan en una sola estructura y se dirigen todos al mismo destino; haz o fascículo, que la vía agrupa axones que pueden proceder de varias estructuras y finalizar en varios destinos; comisura se refiere a que la vía agrupa axones que cruzan la línea media intercomunicando las estructuras de ambos lados del encéfalo o la médula espinal; y, por último, el término fibras, en el SNC, se utiliza con acepciones muy distintas, como son nombrar vías que agrupan menos axones o referirse en general a vías que tienen una característica común (por ejemplo, fibras de proyección para referirse a las vías que comunican diferente estructuras).

Los dos conceptos básicos, por esenciales y fundamentales, para comprender la organización anatómica del SNC por tanto son: la agrupación de las neuronas en agrupaciones funcionales -estructuras de la sustancia gris- y las agrupaciones de axones que forman las vías de comunicación que se establecen entre ellas -estructuras de la sustancia blanca-.

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